XLI
PASO DEL NOROESTE
2 . CAMINAR ENTRE SOMBRAS
La noche nos rodea, negra como la tinta,
entra por la ventana, su oscuridad desliza,
repta por los rincones, se esconde de la luz
y al moverse las llamas se mueve a contraluz.
Mi corazón de niño como un tambor resuena,
siento cómo en mi nuca respira un alma en pena;
las sombras se agazapan y rodean la vela
y avanzan junto a mí al subir la escalera.
Sombras de los balaustres, sombras que hacen la lámpara,
y la sombra del niño camino de la cama...
todas las sombras malas caminan tras, tras, tras,
y la noche negrísima les sigue por atrás.