IV
LIBROS ILUSTRADOS EN INVIERNO
El verano se apaga, va llegando el invierno...
mañanas escarchadas, cosquilleo en los dedos,
petirrojos curiosos, asustadizos grajos,
y lo mejor de todo: los libros ilustrados.
Lo que antes era agua, duro como una piedra;
paseo por encima, junto con mi niñera;
pero el agua corriente, los arroyos, los lagos,
los encontramos sólo en libros ilustrados.
Las cosas más bonitas, los dibujos más nítidos,
allí están, esperando los ojos de los niños;
ovejas y pastores, árboles y cayados,
todo puede encontrarse en libros ilustrados.
En ellos vemos cómo son diferentes cosas:
los mares y ciudades, las montañas y costas,
y los duendes huyendo, y las hadas volando,
en las bellas imágenes de libros ilustrados.
¿Cómo podré alabaros, cantar vuestra belleza,
días maravillosos junto a la chimenea,
en un rincón del cuarto de jugar, abrigados,
leyendo en compañía los libros ilustrados?